Una hermosa escapada en Baugeois
Entre el hilo de plata del Sarthe y los secretos bien guardados del Baugeois, Anjou le invita a una aventura donde naturaleza e historia se entrelazan. Aquí, los ríos susurran historias que se remontan a miles de años, los campanarios giran hacia el cielo como desafiando a la lógica y las boticas de antaño conservan sus misteriosos remedios. Reme suavemente por el agua, empuje la puerta de un castillo dormido, descifre los enigmas de un gabinete de curiosidades... Durante un fin de semana, tómese su tiempo para dejarse sorprender.
Te encantará
Remar por las islas salvajes de la Sarthe
Métase en la piel de un señor del siglo XV en el castillo de Baugé
Descubra el secreto de los campanarios retorcidos
Explore un museo donde conviven momias, mariposas y brazaletes neolíticos
Día 1 : de Tiercé a los tesoros del patrimonio de Anjou
Mañana: piragüismo en las aguas del angevino Sarthe
Comience su aventura en el centro náutico de Porte-Bise, en Tiercé. Aquí, el Sarthe serpentea tranquilamente entre islotes verdes y orillas sombreadas. Embárquese en una travesía en canoa hasta Cheffes. Mientras rema, la naturaleza reclama sus derechos: pacientes garzas, sigilosos martines pescadores y libélulas iridiscentes puntúan su navegación.
El agua se anima a medida que se acerca a Cheffes. Aquí se enfrentará a cinco rápidos, un paso único en el País del Loira donde el río juega a saltar entre las rocas. Una pequeña dosis de adrenalina antes de volver a subir tranquilamente por la esclusa, como en los tiempos de los barqueros.
Tarde: un viaje en el tiempo para todos
Hay dos maneras de pasar la tarde. Surque los cielos en el Espace Air Passion del aeropuerto de Angers-Marcé. En este templo de los primeros conquistadores del cielo, más de cuarenta aviones y planeadores cuentan la historia de la aviación de 1900 a 1970. Admire el René Gasnier nº 3, el primer avión que voló en Anjou en 1908. Los niños se maravillarán al subir a bordo del Fouga Magister, con el casco de piloto puesto, mientras que los aficionados observarán cómo los voluntarios restauran estos pájaros mecánicos ante sus propios ojos.
O ponga rumbo al castillo de Durtal, auténtica fortaleza que vigila el valle del Loir desde su promontorio rocoso. Abra de un empujón la puerta de este centinela de piedra que ha visto ir y venir a reyes y reinas. Desde el parapeto hasta la galería de 40 metros de largo, le contaremos la agitada historia de este testigo del paso de la Edad Media al Renacimiento. Las antiguas cocinas desvelan sus secretos y las vigas del tejado del siglo XV cuentan quinientos años de historia en el crujir de sus vigas. En la "sala de los engoulents", las gárgolas parecen observarle, mientras que la "sala del diablo" aún se estremece con los complots que allí se tramaron.
Día 2 : en los secretos del Baugeois
Mañana: remedios de antaño y palacio real
En Baugé-en-Anjou, elHôtel-Dieu le transporta al mundo médico de antaño. Su botica, una de las mejores de Europa, alberga más de 650 frascos de misterioso contenido: sangre de dragón, polvo de cochinilla, ojos de cangrejo de río... En la gran sala de los enfermos, descubra cómo se trataba a la gente bajo Luis XIV, antes de pasear por el jardín de los simples, donde las plantas medicinales siguen llenando el aire.
A tiro de piedra, el castillo de Baugé le invita a cenar a la mesa del rey René. Este príncipe erudito, primo de los reyes de Francia, hizo de este íntimo palacio su residencia favorita. Desde el salón de banquetes hasta el desván transformado en bosque poético, la nueva escenografía le invita a compartir la refinada vida cotidiana de este caballero artista del siglo XV.
Tarde: enigmas arquitectónicos y gabinete de curiosidades
Por la tarde, salga a descubrir las misteriosas agujas retorcidas de la región de Baugeois, que desafían las leyes de la gravedad. La región de Baugeois cuenta con la mayor concentración de estas curiosidades arquitectónicas de Francia. En Pontigné, admire la espiral perfecta del campanario de la iglesia de Saint-Denis, que da un cuarto de vuelta sobre sí mismo. En Vieil-Baugé, el campanario está a la vez torcido e inclinado, como si la mano del diablo lo hubiera torcido, según la leyenda local. En Fontaine-Guérin, la aguja gira de izquierda a derecha, a diferencia de las demás. Estos misteriosos monumentos suscitan muchas preguntas: ¿se trata de un diseño arquitectónico o de una deformación natural de la madera? Le toca a usted formarse su propia opinión.
Termine su visita en Beaufort-en-Anjou, en el museo Joseph-Denais. Este gabinete de curiosidades, creado en 1905 por un periodista apasionado, es un auténtico recorrido por el mundo inmóvil. En este lugar intemporal, conviven más de 9.000 objetos heterogéneos: momias egipcias, esculturas de Camille Claudel, fósiles de dinosaurios, brazaletes neolíticos... El edificio en sí, con su singular arquitectura que combina la influencia florentina y los tejados de pizarra, es una curiosidad por derecho propio.
¿Desea prolongar su estancia en Anjou?
- Pedalee por el Loira en bici entre Angers y Tours, siguiendo las huellas de los castillos renacentistas.
- Explore las bodegas de Saumur y sus galerías trogloditas donde envejece el néctar de las laderas del Loira.
- Descubra los extraordinarios jardines de Terra Botanica en Angers, el parque vegetal más importante de Europa.